sábado, 9 de noviembre de 2013

(Sinfonía Acuática y una canción otoñal): Sirimiri in Blue

Danza el agua en millonésimas partículas en el interior de la atmósfera, bailan para caer y caer sobre un mundo gris y ceniciento. Llueven acristaladas, como si no fueran una gota de agua que pesadas caen de las nubes, sino como una promesa a la tierra que necesita verse reflejada en un charco, en un parabrisas, o en las hojas yermas y acres que yacen sobre el asfalto otoñal. Sólo que este calabobo, esta sirimiri, o éste lloviznar es azul. Azul como un mar, como un cargamento de tinta que se ha vertido de un avión, azul como el cielo azul que hay encima de las nubes grises que las proyectan hacía abajo. Y por que yo quiero es azul, por que me lo imaginé en un sueño y en una canción. Por que la anarquía surrealista de mi ser le ha querido restar a la realidad este matiz. Agua azul en la palma de la mano, agua azul en la asombrada retina de un transeúnte que sin duda mira asombrado su camiseta blanca. Agua azul por que yo quiero... agua caprichosamente azul para todos aquellos que escuchen mi canción y quieran soñar conmigo... con Sirimiri in Blue.

No hay comentarios:

Publicar un comentario