Luz Naranja sobre Minio y sobre Naranja

Luz Naranja sobre Minio y sobre Naranja. Esta canción se la dedico a una parada de tren a altas horas de madrugada, cuando viajaba con mis padres de Barcelona a Cádiz. No recuerdo el lugar, solo que todos dormían y que había una vieja fábrica llena de hierros y objetos metálicos inservibles esparcidos por doquier. La extraña fascinación que sentía solo puede ser explicada si se rememora desde el punto de vista de un niño. Más allá de la óptica del tiempo y del espacio donde todos los seres humanos estamos encuadrados, percibía una nueva dimensión, todo era naranja por que la luz de las farolas de ese color lo impregnaba todo y no cabía en mi cabeza que realmente las cosas allí fueran de otro color. Este efecto tipo "Gafas de Sol", se coló en mi cabeza y me parecía sorprendente que todo estuviese allí tan parado y quedo como si hubieran puesto una mesa llena de comida y ningún comensal. Luz Naranja sobre restos oxidados y vallas pintadas de Minio... La rutina de los ojos adultos que lo explican todo, fue para mi ese día de la niñez un un misterio insondable, no sabía por que me fascinaba tanto aquel viaje alucinado y tampoco importaba, aquella parada nocturna, en aquel teatro de decorado olvidado solo para mis ojos... duró poco tiempo, pero en la memoria vivencial del recuerdo duró lo suficiente... de ahí esta canción. Dedicada a mis padres que han venido a ver que es de mi vida... y dedicada sobre todo a mi madre que de todas: le encanta esta canción...